Desde hace un buen tiempo el mundo se dio cuenta que los biocombustibles no resuelven problemas. Por el contrario, su proceso de producción conlleva a serios problemas alimentarios y ecosistémicos. Se le quita la comida al hombre para dársela a un carro.
En Colombia, el gobierno patrocina y promueve por medio de subsidios y leyes, la producción y el consumo de los biocombustibles, todo en aras del progreso y con el discurso de generación de empleo y otras cuantas mentiras que suenan a verdades cuando los medios prestan una y otra vez sus micrófonos y ayudan con la propaganda.
Mucho peor es la situación cuando el dueño de uno de los canales privados tiene fuertes inversiones en la producción de Etanol, todo se transforma en una relación en la que el gobierno otorga garantías para que el negocio de un particular (Ardila Lule) funcione sobre ruedas, pero a la vez obtiene publicidad y sustento en noticieros.
A continuación les recomiendo unos videos muy concretos sobre los biocombustibles en Colombia:
Aquí se puede ver una corta charla sobre los biocombustibles en Colombia, que da un breve panorama sobre los problemas que trae al país:
En este video (7 min) se habla de la dependencia del petróleo y de cómo al producir biocombustibles, solo nos hacemos más dependientes:
En este video se muestra la propaganda del gobierno para cultivar palma africana (primer fragmento del video) y luego se contrasta con los problemas que genera:
Finalmente, este es un capítulo de la serie Contravía en donde se muestran el lado humano del proceso de cultivo de palma. Como siempre, todo se hace pasando por encima de los de ruana, en tres partes:
A quién le creemos, ¿Al gobierno y su promesa de progreso que nunca llega y nunca llegará o a los campesinos, indígenas y afroaméricanos que solo quiere que se respete su medio de vida?
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